En ésta entrevista Oliver Bellido Sainz nos habla de Luka y su historia, para que conozcan como éste extraordinario emprendimiento al que se le apostó para escalarlo y los resultados que tuvo.

¿Oliver podrías indicarnos tu edad y de qué parte de Bolivia eres?

Tengo 37 años y nací en la ciudad de La Paz.

Cuéntanos por favor acerca de tus inicios como emprendedor.

Mi primer emprendimiento, recuerdo, fue cuando tenía unos 20 años. Estaba en los últimos años de mi carrera de Ingeniería Comercial y a la vez estaba trabajando en un proyecto de un restaurante que atendía a las salas de cine VIP. La empresa era de desarrollo de software. Como empecé, recuerdo que en el trabajo que tenía de atender a las salas de cine, podía ver que las personas tenían que venir de forma física a comprar sus entradas para una película. Había visto en otras partes del mundo que se podía comprar las entradas de cine por Internet y que eran las formas más cómodas para reservar, con mi socio vimos una oportunidad para construir un sistema de venta de entradas de ticket online, donde hicimos una de las primeras compras por Internet en Bolivia con tarjetas de crédito y débito, integramos todo el sistema. A partir de ese momento comenzamos a desarrollar productos digitales para grandes empresas en Bolivia y así fue como entré al mundo del desarrollo de tecnología y al mundo de los pagos digitales.

¿Podrías contarnos qué es LUKA y qué tipo de beneficios brinda?

LUKA es una plataforma que automatiza la recaudación y gestión de cobros de las empresas a través de WhatsApp. Busca transformar la recaudación de cuentas por cobrar bajo un proceso nuevo, simple y rápido.

¿Podrías contarnos por qué decidieron crear LUKA y cuál fue la visión o la necesidad que buscaban atender con esta plataforma?

Para entender el por qué, voy a referir primero a un dato que nos comparte el Banco Mundial en el Global Findex Database. Banco Mundial nos dice que en Latinoamérica aproximadamente el 70% de las personas mayores de 15 años están bancarizadas para el 2022 y que solamente un 30% de las personas al 2022 había hecho un pago digital para pagar un servicio básico. En Bolivia los números son muy similares: los bancarizados son 68% y las personas que han pagado un servicio básico de forma digital 28%. Cuando vemos este dato y nos preguntamos cuánto es el porcentaje de la población que paga en Alemania, por ejemplo, o en las economías de desarrollo desarrolladas, el porcentaje es del 90%. Ahí tenemos, una brecha que ocasiona un costo elevado a las empresas de nuestra región en la recaudación y cobros, principalmente cuando son pagos recurrentes.

Nosotros vimos la oportunidad de cambiar esta cultura de pago regional, siendo uno de los actores que cierre la brecha. Somos socios de WhatsApp y asi como esta plataforma cambió la forma en como nos comunicamos, con Luka buscamos cambiar la forma en la que las personas hacen sus pagos. Queremos lograr no solamente que las personas paguen de forma digital (por ejemplo una factura de telefonía móvil), sino que las personas hagan sus pagos a tiempo (en el tiempo que espera la empresa que les brinda un servicio).

¿Qué factores les diferencian de todos los emprendimientos similares en el mercado?

Fuimos de las primeras empresas en Latinoamérica en hacer pagos por WhatsApp. En lugar de crear una plataforma nueva de pagos, (una aplicación,web, etc) estamos utilizando el canal que más utilizan las personas para comunicarse, para ayudarles también en sus pagos.

¿Cuál fue la razón principal para buscar inversión para su emprendimiento y qué objetivos esperaban alcanzar con ese financiamiento?

La respuesta a esto creo que depende mucho de la etapa en la que se encontraba nuestra empresa. Por ejemplo durante la etapa inicial, de concepción, la principal razón para buscar inversión fue para desarrollar una prueba de concepto. Teníamos una idea, teníamos un modelo de negocio que podía funcionar, teníamos una oportunidad de mercado para lanzar algo nuevo y algo que podía cambiar el mercado y necesitábamos probar, hacer una prueba de concepto y probar con uno o dos clientes y empezar a crear a partir de allí el producto. Más adelante ya tuvimos otros retos que es para mejorar ese producto, para lograr crecimiento una vez que has validado que el producto entregue el valor esperado y para ir encontrando nuevas características que permitan a la empresa lograr un crecimiento más rápido y sostenible.

¿Cuántas empresas o inversores contactaron antes de finalmente asegurar la inversión para su proyecto?

En la primera etapa tuvimos la suerte de poder levantar de contactos inversores ángeles que ya habían trabajado antes con nosotros. Entonces, la búsqueda no tuvo que hacerse muy exhaustiva. Para una siguiente ronda, buscamos una inversión institucional, sí tuvimos que contactar alrededor de unos 12 fondos para poder cerrar con uno.

¿Quiénes invirtieron en LUKA y cómo lograron obtener esas inversiones? ¿Podrían detallarnos el proceso que siguieron para conseguir el financiamiento?

Entre los inversionistas tenemos Inversionistas Ángeles, Empresas de Tecnología, y un fondo institucional. Por ejemplo, entre las empresas de tecnología está Minka, una startup que opera en Colombia, desarrollando un proyecto de transferencias entre personas, integrando a todos los bancos del país. Aquí en Bolivia, entre los fondos institucionales está Escalatec, parte de la Fundación Solidez y Fundapro. Ellos también invirtieron en LUKA y aportaron mucho al crecimiento.

Y bueno, para el proceso de inversión, de financiamiento, lo primero es preparar un pitch deck donde describes las cosas más importantes de la empresa: el problema, el equipo, la solución, tu mercado, el análisis competitivo, y qué propones desde los números, y cuáles son tus métricas de crecimiento de acuerdo a tu negocio. A partir de esta presentación, si los inversores están interesados, vendrán conversaciones, hasta llegar a un proceso de evaluación. Y una termina el proceso, obtienes el financiamiento.

Ustedes son una plataforma fintech. ¿Qué creen que vieron los inversionistas en LUKA que los motivó a apostar por su proyecto?

Creo que principalmente lo que los motivó fue, primero el equipo, la trayectoria que tenemos entre mi cofundador y yo y los primeros inversores que confiaron en nosotros. Y después el producto, es algo que aún no existía en el mercado, nadie lo estaba haciendo, teníamos una ventana de oportunidad para aprovechar de crear un producto, algo nuevo, y donde hay un mercado interesante para crecer.

¿Cuál fue la suma invertida?

La suma de nuestra última ronda de inversión fue de 500 mil dólares.

¿De qué manera invirtieron el dinero obtenido de la inversión y en qué áreas específicas de la empresa se enfocaron y por qué?

El dinero fue invertido principalmente en desarrollo de producto y crecimiento de mercado. La razón principal fue buscar desarrollar características de producto que nos permitan tener un crecimiento acelerado y resolver el problema de la recaudación de forma integral. Y una vez desarrolladas estas características invertir en crecimiento con el objetivo de que el servicio sea utilizado por diferentes tipos de industrias y empresas y empezar a ver indicadores de cómo funciona para cada una, aprender de ello y volver a mejorar a partir de ese aprendizaje.

¿Consideras que el proceso de obtención de la inversión fue complicado? ¿Qué consejo le darías a otros emprendedores que están en busca de inversión extranjera para sus proyectos?

Más que un proceso complicado, yo diría es un proceso que demanda tiempo, mucho tiempo. Entonces, mi recomendación iría en ese sentido. Antes de salir a levantar capital, primero, estar consciente del tiempo que se va a destinar para esto, les va a demandar una gran parte de su tiempo y es muy importante planificar cada paso del proceso sumado a tus responsabilidades actuales. Y segundo, ser eficientes con la información que se comparte, tienen que tratar de estandarizar todo el proceso, desde las presentaciones hasta toda la información que se va a preparar y compartir con los inversores, buscando justamente ganar tiempo en el proceso, para poder cumplir con otras responsabilidades que demanda la empresa. Entonces, esa sería mi recomendación. Prepararse muy bien y estandarizar el proceso.

¿En qué aspectos se enfocaron los inversionistas durante el proceso de evaluación para determinar si iban a invertir en su emprendimiento?

Los aspectos pueden ser varios. Yo los agruparía en tres partes. Primero está el mercado. Los inversionistas ven si es un mercado que les interesa entrar, el potencial y qué valor pueden aportar. Después está el equipo, en etapas muy tempranas de la empresa esto es lo más importante, ya que al no existir mucha trayectoria de la empresa, se basa mucho en las habilidades del equipo que ha podido lograr antes, que pueda validar, que pueda ser un equipo ideal para construir la solución que se está proponiendo. Y tercero está justamente el producto, la solución. ¿Cuánto potencial tiene para cambiar las cosas? Y en etapas más avanzadas van a mirar qué ha logrado esta solución hasta ahora, cuáles son sus indicadores de crecimiento y qué potencial tiene para seguir creciendo en el mercado que propone.

¿Están actualmente en búsqueda de nuevas inversiones y de ser así para qué objetivos específicos o proyectos planean utilizar estos fondos?

Por ahora no estamos en busca de nuevas inversiones, posiblemente al año, podamos abrir una nueva ronda de inversión nuevamente.

¿Quiénes son los socios actuales de LUKA y cuál es su rol o contribución en la empresa?

Como socios fundadores, solo somos dos. Estoy yo como CEO, veo toda la parte operativa, administrativa y de negocio de la empresa. Y está mi socio Reinout el es Holandes y él ve toda la parte de tecnología y soporte de la empresa.

¿Qué crees que les hace falta a los emprendedores bolivianos para poder escalar más rápidamente con sus emprendimientos?

Yo creo que uno de los factores clave para lograr la escalabilidad, ya sea para emprendedores bolivianos o extranjeros, es el enfoque. Creo que muchos, como emprendedores, y me pongo yo en esa misma línea, en algunas veces cometemos el error de querer abarcar mucho pensando que con ese abarque vamos a escalar más rápido. Y creo que ocurre todo lo contrario, cuando uno puede enfocarse más en resultados pequeños y a corto plazo, y concentrarse en la velocidad de conseguir esos resultados para saltar al siguiente nivel, y volverlo eso como un proceso repetitivo, es un factor que ayuda mucho a escalar, a escalar el producto, a aprender del producto, si fallas a fallar rápido, y si el producto es un éxito, escalarlo.

¿Cómo te sientes tú como emprendedor boliviano que ha logrado destacar en el panorama empresarial internacional?

Me siento agradecido con Dios y con la vida por estar en este camino, por permitirme trabajar en algo que amo, que me encanta. Siento que aún tengo mucho por aprender, por descubrir y lograr con la empresa, y estoy emocionado por todo lo que viene.